Día sin carro, amado por unos, odiado por otros

Una vez más como cada año por esta época, milones de Bogotanos entran en discusión y controversia, por una medida que para muchos es de aprendizaje y concientización social, mientras a otros les parece absurda y obsoleta.El famoso día sin carro.

Alrededor de 1.500.000 automóviles y mas de 400.000 motocicletas,dejaran de circular por las calles de la capital colombiana, disminuyendo considerablemente los niveles de contaminación, ruido y trancones que hacen que hasta la persona más pacifica logre exaltarse, un día sin carro es un respiro para la ciudad, un respiro para el planeta.

Vale la pena recordar que esta medida es acogida con gran éxito en varias ciudades del mundo, logrando generar conciencia sobre el grave daño ambiental que producen los carros particulares, es cierto el servicio publico también genera contaminación, pero este logra movilizar si hablamos de Transmilenio más de cien personas por recorrido, en su defecto el automóvil, lo máximo que moviliza son cuatro personas, esto quiere decir que estos niveles no se pueden comparar.

Es una oportunidad para  que la gente use medios alternativos de transporte como la bicicleta, una gran oportunidad para que muchos de nosotros cambiemos nuestra forma de pensar  y nos preocupemos por el medio ambiente, la ciudad cada día colapsa de manera trágica y  la gran mayoría le endosa la culpa al transporte publico , cuando en realidad al grave problema es cultural, el problema es darse cuenta que un automóvil en una ciudad como Bogotá hoy en día es prácticamente obsoleto, aunque muchos prefieren aguantarse dos horas en un trancon porque su auto les da estatus. Conciencia es lo único que se necesita para poder mejorar la movilidad, menos uso del carro particular, más uso de la bicicleta y el transporte publico, el medio ambiente lo merece.